Un pueblo suizo sepultado bajo millones de m2 de escombros al derrumbarse un glaciar
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El miércoles 28 de mayo, el desplome del glaciar Birch, en los Alpes suizos, sepultó casi todo el pueblo de Blatten bajo el hielo, el barro y las rocas.
Según Global Newslas autoridades habían evacuado a los 300 habitantes del pueblo el 19 de mayo, debido a las advertencias sobre la inestabilidad del glaciar . El jueves, tras el derrumbe, una persona seguía en paradero desconocido .
Imágenes de drones de la cadena suiza SRF muestran lodo y escombros cubriendo partes del pueblo, incluidas las laderas del río y del valle.
Stephane Ganzer, jefe de seguridad de la región meridional del Valais, declaró a la cadena de televisión local Canal 9:
"Lo que puedo decirles en este momento es que alrededor del 90% del pueblo está cubierto o destruido, por lo que es una gran catástrofe lo que ha ocurrido aquí en Blatten".
Añadió que no estaba claro de inmediato si había heridos.
Las autoridades suizas han desplegado la unidad de ayuda para catástrofes del ejército y helicópteros de búsqueda y rescate para evaluar el alcance de la destrucción. Funcionarios del Gobierno también se dirigen al lugar, según la BBC.
También según la BBClos científicos llevan tiempo advirtiendo de que algunas comunidades alpinas se enfrentan a riesgos crecientes debido al deshielo de los glaciares. Hace dos años, los habitantes de la ciudad de Brienz, en el este de Suiza, fueron evacuados cuando la inestable ladera de la montaña que se alzaba sobre ellos empezó a derrumbarse.
Los expertos sugieren que el cambio climático y la pérdida de permafrost pueden haber contribuido a la inestabilidad del glaciar.
Sin embargo, otros expertos entrevistados por Reuters señalaron que era difícil determinar el impacto exacto del cambio climático en el derrumbe, dado el importante papel desempeñado por la inestabilidad de la ladera.
Christian Huggel, profesor de medio ambiente y clima de la Universidad de Zúrich, explicó que múltiples factores contribuyeron al suceso de Blatten, pero confirmó que el aumento de las temperaturas en los Alpes había afectado al permafrost local.
Las autoridades afirmaron que millones de metros cúbicos de roca y tierra se han derrumbado desde la evacuación de Blatten a principios de mes, ya que se sabía que la montaña situada detrás del glaciar se estaba desestabilizando.
El alcalde de Blatten, Matthias Bellwald, calificó el suceso de catastrófico, pero prometió reconstruir. El Gobierno suizo sigue vigilando la zona para detectar nuevos riesgos.